A pesar de la envidia que a muchos puede provocarle; el trabajo de un fotógrafo erótico no es tan fácil como puede parecer en un primer momento. Su forma de entender la fotografía no es como la del profesional que hace fotos de carnet o de paisajes. Tras su trabajo hay una preparación mucho más complicada de lo que parece en un primer momento y podría afirmarse que para hacer una foto tarda mucho más tiempo que cualquier otro tipo de fotógrafo.
De ahí que haya que aclarar ciertos aspectos que deberían desterrar para siempre ciertos mitos que no tienen nada que ver con tan complicada profesión. A continuación desglosamos los puntos más importantes de la actividad normal de estos profesionales.
Delimitar el objetivo de las fotos
En algunas ocasiones se entiende por fotografía erótica las que forman parte de un catálogo de ropa interior. El fotógrafo tiene que tener bien claro qué tipo de público va a ver sus fotos y también qué pretende conseguir la empresa que las encarga. La foto erótica puede ser publicitaria, donde es el producto la base de la misma, o destinada a la estimulación de la persona que la ve. Por eso es tan importante saber los límites que no hay que cruzar a la hora de comenzar una sesión fotográfica.
Evitar la vulgaridad
Estos profesionales tienen un claro límite entre el erotismo y la vulgaridad. Se trata de ofrecer imágenes sensuales y sugerentes pero nunca explícitas. Es decir, el fotógrafo de pornografía sabe que tiene que ser explícito, el erótico tiene primero que pensar en qué podría sugerir una imagen y segundo cómo lograr que cada foto envíe ese mensaje que él ha pensado.
Crear un ambiente confortable durante la sesión
La modelo y el fotógrafo forman un binomio indivisible. De la actitud de la modelo dependerá el trabajo del fotógrafo. He aquí la importancia del primer punto que comentábamos. Explicando qué se pretende con esa campaña será más fácil que cualquier modelo vaya entrando en situación y termine ofreciendo todo lo que el fotógrafo necesita para que su trabajo sea aceptado.
Este ambiente de camaradería no solo ha de crearse antes de la sesión sino, especialmente, durante la misma. Cualquier tipo de comentario o de indicación a la modelo ha de hacerse siempre con mucha educación y sobre todo con mucho tacto para evitar herir la sensibilidad de la protagonista. Por lo tanto, diálogo, comprensión, saber hacer y mucha paciencia serían la base de cualquier sesión fotográfica erótica que quiera dar como resultados unas fotografías de calidad.
Elegir las mejores fotos de la sesión
Aunque no lo parezca, en este campo de la fotografía suele darse el caso de que el fotógrafo escoge una serie de fotografías que la persona que ha encargado el trabajo decide no utilizar. ¿Por qué? Porque como venimos indicando, el erotismo está en la mente de cada persona y cada cual considera erótica una situación u otra. Es decir, lo que estimula visualmente al fotógrafo puede no provocarle nada a otra. La elección de las fotos más adecuadas es una ardua tarea que exige tanto experiencia como tener los conceptos de la campaña publicitaria o encargo totalmente claros. Solo así podrán evitar haber trabajado durante días para lograr unas fotos que terminen en la papelera más cercana o tildadas de pornográficas.
Como habrá podido comprobar, el trabajo de fotógrafo erótico no es tan envidiable como parece en un primer momento. Este profesional tiene que pensar en qué pensarán todos aquellos que vean sus fotos, no puede fotografiar siguiendo sus gustos y tiene una senda marcada de antemano de la que no puede salirse.
Solo el amor por la fotografía artística y publicitaria les permite desempeñar su labor de forma profesional y eficiente. De no ser así sería imposible que existieran tan reputados profesionales que han basado su trabajo en quedarse siempre en la sugerencia sin llegar a la pornografía. Sobre tan fino alambre caminan estos fotógrafos cuyo trabajo no siempre está tan bien valorado como se merece. Esperamos haberle aclarado los aspectos más fundamentales de este tipo de fotografía y también las complicaciones que conlleva dedicarse a la misma de forma profesional.
¿Qué es un fotógrafo erótico?
Un fotógrafo erótico es aquel profesional que se dedica a fotografiar a modelos para estimular la sensualidad y el erotismo de los que vean sus fotografías. Como suele suceder, el problema suele está en el ojo del que ve y no en la propia imagen por lo que su trabajo no es ni tan sencillo, ni tan envidiable como puede parecer en un primer momento.
¿A qué se dedica este tipo de fotógrafo?
Sus fotos pueden tener dos objetivos fundamentales. El primero el de crear campañas de publicidad de productos como ropa interior o perfumes. En algunas ocasiones las marcas confían plenamente en este tipo de profesionales para que diseñen la campaña publicitaria que deseen y muestren el producto de la forma que crean más conveniente. El segundo el de presentar una colección de fotos eróticas tal cual que logren estimular la sensualidad de aquellos que las vean.
¿Dónde está el límite en el trabajo de estos profesionales?
Se entiende por pornografía la exposición explícita de los órganos genitales. El erotismo no tiene por qué caer en la vulgaridad por lo que deberá usar todo tipo de recursos, paisajes, efectos ópticos, combinaciones de color y similares para provocar una reacción en el espectador lo más implícita posible. La idea es sugerir y no mostrar.
¿Cómo encontrar a un profesional de prestigio y no a un estafador?
Lamentablemente, hay casos más que conocidos en los que un fotógrafo erótico ha terminado procesado por abusos sexuales. La mejor manera de evitar este tipo de situaciones es comprobar primero los trabajos que haya hecho esa persona y, si es posible, contactar con aquellas modelos que hayan trabajado con él/ella. Solo así evitará caer en las manos de personas sin escrúpulos que denigran la profesión y que podrían terminar convirtiéndole en víctima de todo tipo de abusos.
¿Se puede considerar a un fotógrafo erótico un artista?
La respuesta es afirmativa. Siempre se ha de tener en cuenta que estamos ante un profesional que tiene que reflejar una imagen erótica de la modelo, o el modelo, que va a fotografiar. Es decir, no se trata de hacer una foto y ya está sino de apostar por la estética, por hacer algo distinto, lleno de carga erótica y que invite a imaginar algo más. De ahí que sea tan importante el concepto de arte que tenga este profesional y el conocimiento de los límites que convertirían sus fotos en pornográficas. En la mayoría de los casos, estos límites no se cruzan y siempre se opta por fotografiar a las modelos de forma que expresen con su mirada o postura todo lo que el fotógrafo quiere conseguir de ellas.
¿Qué no es un fotógrafo erótico?
Aquella persona que no tiene un book con sus trabajos anteriores, que no tiene una web en la que mostrar sus trabajos, que no tiene un estudio profesional y que no deja de ser alguien que quiere hacer fotos de alguien desnudo. Recuerde que este tipo de profesionales ha de tener un bagaje profesional comprobable y ofrecer una garantía total de satisfacción por su trabajo. En caso contrario podría convertir su sesión de fotos en el inicio de un largo camino con parada en los juzgados.
¿Hay intrusismo en el sector?
Demasiado. Cualquier persona tiene hoy una cámara digital de cierta calidad y decide comenzar a hacerle fotos eróticas a su pareja. Esta práctica nos parece interesante e incluso podría mejorar la vida sexual de cualquier persona pero no es aval suficiente para dar el salto a la profesionalidad. En algunos casos así ha sucedido y es ahí donde se producen todo tipo de problemas legales y abusos poco deseables. De ahí que le aconsejemos apostar por un fotógrafo profesional con una vida profesional fácilmente comprobable.
En esta web apostamos, precisamente, por este tipo de profesionales para garantizar que los trabajos a realizar se lleven a cabo correctamente y sin temor a ningún tipo de consecuencia poco aconsejable. De hecho, el que varios profesionales decidan unirse bajo la misma web es ya síntoma de seguridad. Nuestra idea es ofrecerle a cada posible cliente un servicio tan profesional como seguro y sin temor alguno a tener problemas de inciertas consecuencias.